El marido entra a la cama y le susurra suave y apasionadamente
al oido a la mujer:
"estoy sin calzoncillos..."
Y la mujer le contesta:
"Oh Chingados!, dejame dormir... mañana te lavo unos"
al oido a la mujer:
"estoy sin calzoncillos..."
Y la mujer le contesta:
"Oh Chingados!, dejame dormir... mañana te lavo unos"