La Navidad es la época más linda y esperada del calendario.
Significa reunión de familias, de padres e hijos, de Hermanos, parientes y amigos.
Época de reflexionar sobre nuestros aciertos y desaciertos, sueños, esperanzas y logros.
La música de Navidad alcanza las cuerdas más sensibles de nuestro corazón y lo hacen vibrar con alegría.
Es época de recordar que todos formamos parte de un todo, que todos somos hermanos y estamos unidos por lazos invisibles .
No somos seres aislados, todo lo que hacemos tiene efecto en los demás.
Aprovechemos esta Navidad para perdonar a todos aquellos que nos ofendieron de palabra y de obra.
Empecemos el Año Nuevo con el corazón aligerado por el perdón y enriquecido por el Amor.
Compartamos nuestra alegría y nuestra mesa con alguien que esté solo, que no tenga familia o que se sienta triste.
Ese invitado representará la figura de Cristo.
y así podremos recibir la bendición de un Nuevo Año 2010.